El Quijote, un texto que encierra

El Quijote, un texto que encierra
el mundo: Lozano Ortega

·         “Una vez que se cae en El Quijote es muy difícil salir de él”, afirmó la especialista en la obra de Cervantes

Adriana Vivanco

“Muchas veces tenemos resistencia para acercarnos a ciertos libros porque pensamos que por ser clásicos son complejos y aburridos. Hay un prejuicio muy grande acerca de ellos, se cree que son ajenos a nosotros y que hablan de cosas que no nos importan cuando es precisamente todo lo contrario”, expresó María de las Mercedes Lozano Ortega, académica de la Facultad de Letras Españolas de la Universidad Veracruzana, quien participó en el programa Martes de Lectores y Lecturas.

El evento se realizó el 12 de marzo en la sala “Carlos Fuentes Lemus” de la Unidad de Servicios Bibliotecarios y de Información (USBI) campus Xalapa. “Un Quijote para la vida”, fue el título de la charla en la que Lozano Ortega debatió con los asistentes acerca de las principales causas por las que los lectores no se acercan a este libro y en general a los clásicos de la literatura.

“Un clásico es un libro que siempre se va a conectar con nosotros, porque habla de sentimientos, valores, sufrimientos y alegrías del ser humano que son eternos; es decir, las veces que abramos un libro clásico encontraremos algo que nos haga sentir identificados, estremecernos, horrorizarnos o conmovernos.

”Los clásicos son libros que sin importar la edad en la que los leamos lograremos tener acercamientos a las historias, y podremos incluso releerlos con el paso de los años y vivirlos de una forma distinta; es así que El Quijote nos ofrece lecciones de vida importantes y nos habla de muchas cosas con las cuales podemos identificarnos.”

En este sentido, Mario Miguel Ojeda Ramírez, director general de la Unidad de Estudios de Posgrado, opinó: “A mí me parece que el motivo por el cual El Quijote es uno de los libros más leídos –no en el sentido estricto de una lectura lineal como a veces se piensa– es porque existen muchas formas de leerlo y obtener distintas experiencias, es decir, puedes no iniciar por el principio y encontrarte cosas distintas que si lo lees de forma lineal, o incluso puedes retomarlo después de años y encontrar un libro completamente diferente”.

Una vez que se cae en El Quijote es muy difícil salir de él, destacó Lozano Ortega, quien incluso hizo hincapié en el proceso que se da en los lectores al acercarse a esta obra que –a decir de la académica– los envuelve  como un vicio y los insta a leer y releer.

“Sería fantástico que todas las personas pudieran tener acceso a un libro tan maravilloso, El Quijote es un texto que encierra el mundo, es cosa de releerlo, apropiarse de él y recibir todo lo que Cervantes tiene que decirnos con esta historia, compartir la fantasía y las ganas de ser otra persona”, destacó la docente.

Por otra parte, señaló que independientemente de las aportaciones literarias de este texto, la historia en sí misma es un trabajo humanista en el que a través de las aventuras del Quijote y su fiel compañero, Sancho Panza, el lector puede encontrarse con el mundo.

“El protagonista nos muestra que era un hombre común como todos nosotros, que decide enfrentarse al mundo e intentar ser un héroe que se antepone a las problemáticas que rodean su entorno.

”Tuvo que elegir entre la literatura y la vida, y decidió por la vida pero basada en la literatura, es un recordatorio también de los problemas que se nos presentan en cualquier época y las distintas formas en que los asumimos y de cómo a veces nos refugiamos en la fantasía para lidiarlos. Si algo vale en el libro es la manera en que Cervantes destaca valores como la amistad, el idealismo del amor y la justicia; valores atemporales y universales.”

Lozano Ortega concluyó exhortando a los asistentes a incursionar en el mundo El Quijote para apropiarse de sus aventuras y aprender de la vida riéndose.